martes, 16 de noviembre de 2010

Vuelta a las andadas

Después de tanto y tanto tiempo creo que vuelvo a recaer en mis más primitivas ideas, he vuelto a necesitar aquella figura de la que dependía antes, me hice creer que era una etapa ya pasada pero ahora me doy cuenta de que me engañe a mí mismo, sigo con los mismos deseos y ganas que antes, estoy casi convencido de que la culpa la tiene esta mente mía pero no puedo hacer nada.


Maldito deseo este que me inunda, mi tiempo corre en su reloj, haciéndome creer que con su compañía se parara, pero no es así, el deseo no se sacia con mi pensamiento, no se cual será la solución, solo quiero un NO.

¿Tanto es pedir aquello que ansío? Con un NO podría ser feliz, ¿o sería volver a engañarme a mí mismo?

La respuesta solo la tiene aquella persona sobre la que pienso y deseo, puede que para otra gente sea una tontería, una ridiculez, pero ni yo se que pasara, solo sé que mis pensamientos están centrados en esa persona, y no sé como cambiarlo.

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