Soy una persona que produce asco a su alrededor, una perdona que no sirve para nada...
He visto ante mis ojos el marchar de mi luz ante mi sangre temblorosa de impotencia.
Soy un inútil y jamás me voy a perdonar lo que acabo de permitir ni las formas que he usado para ello. Me he comportado como un imbécil que por mucho dolor que lleve en mi, ella sigue siendo mi luz incandescente.
Y aunque no encontremos solución, no puedo vivir con ese mísero "adiós" al haber compartido tantísimos momentos y sentimientos en 11 meses.
Simplemente no se lo merece.
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Burbujea pues...