X
Hoy la tierra y los cielos me sonríen;
hoy llega al fondo de mi alma el sol;
hoy la he visto..., la he visto y me ha mirado.
¡Hoy creo en Dios!
Bécquer
El mero hecho de intentarlo ya es un gran paso.
En estas paredes todo es fracasar y decepcionar, no hay excepción.
Hasta el hecho de estar presente, la mayoría de las veces, es un fracaso.
El sol enrojece los pulmones del pequeño niño Corazón,
que aunque lleno de ron,
guarda su esperanza en aquél jarrón.
Pobre niño Corazón,
nadie entiende au desazón.
De día siente frío,
y de noche arde en su río.
Nadie te siente, Corazón.
Dime, ¿por qué eres tan cabezón?
Pobre niño Corazón,
no llores más porque no tienes razón.